Porque a veces la vida te sorprende
con esos golpes que jamás esperabas que llegaran, te sorprende con esas
situaciones que nunca te imaginabas y lo peor de todo, es que se te es
imposible practicar como reaccionar. Tenes que adaptarte al papel, hacer la
escena en vivo. Arriba el telón, las luces, el coro y ya toda la gente te esta
esperando para ver como safas de ésta. Y en es mismo instante es cuando dejamos
conocer lo más puro de nosotros, nuestra esencia, lo que sale del alma sin
practicar, lo que no reflexionamos si no solo lo decimos. Y tal vez luego de
todo esto, nos ponemos a pensar que podríamos a ver dejado una mejor función,
pero no, la vida es un show constante que no tiene ensayo, es escena tras
escena; Salís a matar, a dar lo mejor y ya entras en otra. Por eso mejor llora,
grita, reí, soña, baila, canta pero ahora ya! Jamás dejes de hacer lo que sentís,
nunca escondas esos sentimientos que mueven a tu corazón, porque tal vez esta
obra llegue a su fin sin haberse completado el guión que imaginabas.
Pd: Si no existieran esas sorpresivas caídas que nos
presenta el camino, jamás aprenderíamos a entender el verdadero valor de un
momento feliz.
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